Preparativos para una nueva batalla entre el gobierno y la Corte

julio 25, 2013

By Alexis Di Capo


El próximo lunes se reinicia la actividad judicial después de la feria y, a la vez, la campaña electoral entra en su última y definitoria quincena. Curiosamente, los hechos más notorios que se produjeron en las últimas semanas fueron judiciales, es decir, la orden de captura del ex Secretario de Transporte Ricardo Jaime y las denuncias por supuestas violaciones contra el nuevo Jefe de Estado Mayor del Ejército, General César Milani. Después de su último round con el gobierno por haber declarado inconstitucional la elección de Consejeros de la Magistratura, los ministros de la Corte Suprema se llamaron a silencio. El fallo del alto tribunal dejando sin efecto la elección de Consejeros de la Magistratura creó sin duda las condiciones óptimas para que Sergio Massa diera el paso decisivo para lanzar su candidatura.

 A la inversa, ahora un triunfo del tigrense en Buenos Aires le haría más fácil a la Corte dar nuevas muestras de independencia. En la agenda de alto voltaje pendiente hay dos temas de gran repercusión política. El primero sería un fallo contra el cepo cambiario. El 29 de mayo pasado, la Corte Suprema reactivó una causa judicial iniciada por un deudor hipotecario que cuestiona la validez del cepo cambiario porque no se le permite comprar dólares en el mercado oficial para cancelar un crédito en esa misma moneda. El Máximo Tribunal le pidió entonces a la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal que le remita el expediente.
José Manuel Moyano Nores tomó un crédito con garantía hipotecaria en moneda extranjera y argumentó que su acreedor “se niega” a recibir el pago en pesos. Moyano Mores presentó un amparo contra el cepo cambiario que fue rechazado por un juez de primera instancia del fuero Contencioso Administrativo y luego por la Cámara. Sus abogados presentaron entonces una “queja” por recurso extraordinario denegado.

Fuentes judiciales explicaron que el planteo de Moyano Nores fue rechazado en las dos instancias anteriores porque “no se hizo un reclamo administrativo previo ante la AFIP”. Además, los jueces consideraron que “no resultaba posible en el marco sumarísimo de la acción de amparo y con la prueba reunida determinar si la conducta de la AFIP y del BCRA estaba viciada de arbitrariedad o ilegalidad manifiesta, por tratarse de una cuestión opinable”. En el expediente “Moyano Nores, José Manuel c/Estado Nacional – AFIP s/amparo ley 16.986”, que tramita en el fuero Contencioso Administrativo Federal, la Justicia entendió hasta ahora que el deudor no “probó el perjuicio en su contra”, esto es, que, como consecuencia de las restricciones cambiarias, hubiera padecido algún daño patrimonial.

Contra esa sentencia, Moyano Nores interpuso un recurso extraordinario que fue denegado por la Cámara, lo que derivó en el recurso de queja. La Corte, con la presencia de seis de sus siete miembros (Raúl Zaffaroni estaba en Italia) decidió pedirle a la Cámara el expediente para estudiar si en este caso debe mantenerse la prohibición de comprar dólares en el mercado oficial. Se trata del primer caso sobre el cepo que llega al máximo tribunal y, según algunos, bien podría ser el próximo gesto de Ricardo Lorenzetti y sus colegas para subrayar sus diferencias sobre el gobierno.

Una excesiva postergación

La otra variante sería dictar sentencia en la causa Clarín, que desde hace dos semanas cuenta con dictamen de la Procuradora General. Se especula con que la Corte, con el voto en disidencia de Eugenio Zaffaroni, se inclinaría hoy por ratificar el fallo de la Sala I de la Cámara Civil y Comercial Federal que declara inconstitucionales varios artículos claves de la ley de medios. Si la Corte se abstuviera de pronunciarse en esta causa en las próximas semanas, se podría interpretar como un gesto de prudencia para no aparecer produciendo un efecto político a apenas días de las primarias del 11 de agosto. Pero la postergación del fallo les crearía a los ministros el problema inverso. Si postergan el fallo, que sería favorable a Clarín, hasta después del 27 de octubre, más de uno podría entender que una dilación de cuatro meses tendría por objeto no complicarle al gobierno la campaña electoral. A partir de ahora, cualquier paso que den los ministros de la Corte tendría un impacto político mayor.