martes, 29 de septiembre de 2015

CREE QUE ES UNA REINA...



























































































































El Gobierno ocultó un dato oficial de pobreza





MARTES 29 DE SEPTIEMBRE DE 2015

El organismo trabajó en un índice integral, pero Economía lo frenó por los malos resultados



 La decisión oficial de no difundir el índice de pobreza no tiene fundamentos técnicos ni sociológicos, como argumenta el Gobierno. Allí sólo pesa la determinación política de Cristina Kirchner. Pese a las justificaciones por "problemas de empalme", multiplicidad de metodologías o estigmatizaciones sociales, el Indec trabajó sigilosamente en un indicador alternativo para calcular la pobreza, pero, al mostrar resultados negativos, Economía decidió ocultarlo.


Documentos a los que accedió LA NACION y fuentes involucradas en ese proyecto estadístico confirmaron la información: el Indec trabajó entre 2011 y comienzos de este año en un índice multidimensional de pobreza. Se trata de un indicador más amplio que el que midió hasta 2013 la exclusión mediante canastas de bienes y servicios.
Para 2012, único cálculo cerrado para ese índice alternativo, 39% de los hogares (4.564.456 millones) tenía al menos una condición de pobreza. Pero "el corte sugerido" por los técnicos que hicieron el trabajo para definir la pobreza fue, no obstante, de tres condiciones como mínimo. Con ese criterio, los hogares pobres eran un 25,8% (3.019.563 millones). Gracias a esos resultados, la medición oficial no se extendió en el tiempo y fue archivada por el Gobierno.
La Universidad Católica Argentina (UCA) estimó que en 2014 el 40,2% de los hogares urbanos (4,5 millones) era pobre o vulnerable en ingresos o derechos sociales, según el primer resultado de su índice multidimensional. Tras un 2013 y 2014 de estancamiento y alta inflación, el dato aparece en línea con lo que venía midiendo alternativamente el Indec y terminó cajoneando. En 2012, y con la metodología vieja por ingresos -que suele minimizar algunas caras de la exclusión social-, el organismo estadístico había informado que los hogares pobres eran sólo el 4% (o sea, 449.090).
De acuerdo con las fuentes consultadas, el proyecto de medición de pobreza multidimensional fue acercado el año pasado a funcionarios de segunda línea del Ministerio de Economía, que conduce Axel Kicillof. Nunca hubo una respuesta. "Se asustaron con los resultados. Los números no son afines", confió un técnico que trabajó en el programa. En el Palacio de Hacienda confirmaron a LA NACION que hay un "grupo grande" trabajando el tema, pero desde antes que asumiera Kicillof. "Con el cambio de base se necesitó un trabajo de adaptación [de las metodologías] mucho más profundo, que aún no se terminó. Incluso se está trabajando con organismos internacionales. No hay ninguna orden para parar ni esconder nada", negaron cerca del funcionario.
En el Indec, en tanto, confirmaron la existencia del proyecto, pero indicaron que trabajaba en forma paralela a la dirección de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). No obstante, el programa del índice multidimensional fue motorizado directamente por la cúpula del organismo, por lo menos hasta que se conocieron los resultados "negativos" que arrojaba para el Gobierno.
"Problemas de empalme", justificó el ex jefe de Gabinete y actual intendente electo de Resistencia, Jorge Capitanich, cuando dejó de difundirse el dato de pobreza por ingresos, el único público entonces. El último índice elaborado por el Indec fue para el primer semestre de 2013 y estimó que en la Argentina había 3,7% de hogares y 4,7% de personas pobres. Kicillof no dio una explicación técnica sino sociológica: publicar el número era "estigmatizar" a los pobres. El más novedoso fue Norberto Itzcovich, director del Indec. El economista afirmó que existen "6000 formas distintas" de calcular la pobreza. Ese argumento lo habilitó a no publicar ninguna.
A pesar de esa justificación, el director del instituto fue, junto con su antecesora, Ana María Edwin, quien encargó el trabajo en 2011 de crear un índice de pobreza multidimensional. De eso se ocupó un equipo llamado Innovación Metodológica, conformado por cinco técnicos (uno de La Cámpora, otro del Movimiento Evita y otros históricos del Indec). El grupo era conducido, según rememora el "Documento de Trabajo Nro. 2 de octubre de 2012: Medición de las privaciones habitacionales según el enfoque multidimensional de la pobreza", por Ana Nora Feldman, directora nacional de Planificación y Coordinación Estadística. Una de las colaboradoras fue Graciela Belloti, nuera de Edwin. En ese entonces, muchos creyeron que el trabajo no avanzaría nunca e incluso dijeron que se trataba de puro marketing o maquillaje de la cúpula del Indec para mostrar avances en los índices.
Parte de eso existió. Por ejemplo, el Instituto de Estadística de Italia (Istat) publica aún en su portal una visita en octubre de 2011 de las autoridades del organismo para discutir la nueva forma de calcular la pobreza. En octubre de 2013, la agencia oficial Télam informó de un "nuevo acuerdo" entre el Indec y Istat. El intercambio incluía "el estudio de los aspectos metodológicos relativos a los nuevos abordajes para el cálculo de la pobreza". Edwin e Itzcovich fueron en ese viaje a buscar el aval de Enrico Giobanini, entonces director del Istat para el trabajo. "Cuando viajaron a Italia, Feldman pedía que a los PowerPoint, por las dudas, no se le pusieran números", relató un técnico que estuvo muy cerca del proyecto del nuevo índice.
Pero, a pesar de las dudas existentes, el trabajo avanzó gracias a algunos de los especialistas del grupo de innovación. Según uno de ellos, el índice multidimensional podía describir las condiciones de vida de los argentinos de acuerdo con la cantidad de privaciones. Pero además ofrecía la desigualdad entre los pobres, el peso de cada uno de los indicadores y podía estratificar la pobreza según los tipos de los hogares. "Si alguien quería sacar de la pobreza a un hogar, le podíamos decir dónde estaban esos hogares, cuáles eran sus características y qué necesitaban", dijo.
Se hicieron dos tipos de ejercicios: uno con hogares con privaciones de una batería de 17 indicadores (material predominante de los pisos de la vivienda, del techo y presencia del cielo raso, tenencia y uso de baño, hacinamiento, acceso a agua segura de red pública, a desagües cloacales y gas de red, asistencia escolar, rezago escolar, logro educativo, analfabetismo, informalidad, subocupación horaria, desocupación, desocupación de larga duración, cobertura de salud y percepción de jubilación o pensión). El segundo cálculo tenía ocho privaciones.
"El índice multidimensional trabaja con varias líneas, no sólo ingresos, por lo que es obvio que en la Argentina aparecen hogares con privaciones por todos lados, por carencias de servicios, informalidad laboral, baja educación, entre otras cosas", explicaron expertos. "El equipo de trabajo no existe más. En concreto, desde el año pasado dejó de producir luego de que se pasaron los resultados al equipo del ministro de Economía. Esos resultados duermen en un cajón", agregó la fuente. La última reunión de Innovación Metodológica fue en mayo de 2015. Yo no había luz verde política.
Cerca de la cúpula del Indec lo admiten. A pesar de que creen que la argumentación técnica para dejar de lado un cálculo sólo por ingresos existe realmente, reconocen que por el timing elegido la decisión de no informar ya ningún tipo de indicador de pobreza desde 2013 tiene que ver con la voluntad política. No lo dicen. Pero todos apuntan a la Presidencia de la Nación.

Del editor: qué significa. La existencia de este indicador refuta las argumentaciones del Gobierno acerca de la imposibilidad técnica de difundir datos de pobreza.

La caja negra del PAMI en La Plata





28/09/2015 - 18:12hs

La obra social de los jubilados y pensionados se ha transformado bajo el mandato K en una cueva de la corrupción oficial. La putrefacción del organismo público en la capital provincial. La militancia rentada y la destrucción de un instituto que supo ser un ejemplo argentino ante el mundo

El despilfarro de los fondos públicos que viene realizando el gobierno kirchnerista a lo largo de la mal llamada década ganada, tiene en el PAMI a uno de los más claros ejemplos de lo que no se debe hacer en la función pública, con ñoquis en todas sus áreas, y con un manejo del dinero por demás espurio que muestra el saqueo que han sufrido las arcas de la obra social de los jubilados.

Hace unos días atrás, se pudo conocer la denuncia de que más de 6.000 personas fueron contratadas por el organismo público, copando esas designaciones la agrupación juvenil La Cámpora, que conduce Máximo Kirchner. Esto desató un escándalo por demostrar cómo el oficialismo utiliza las instalaciones del Estado para beneficio propio y para hacer campaña política, incrementando el gasto estatal en decenas de millones de pesos con militantes rentados del nucleamiento liderado por el hijo presidencial.


El avance del kirchnerismo sobre la obra social no queda sólo en la Capital Federal, sino que se da en todo el país, teniendo especial epicentro en la ciudad de La Plata, lugar donde el organismo está conducido por la joven abogada Erica Luján Pinto, cercana a La Cámpora, y que en los últimos meses ha visto incrementar el personal en forma significativa, muchos de los cuales sin destino alguno y sólo dedicados a la “rosca política”.

Toda esta situación ha llevado a una degradación del PAMI en la ciudad de las diagonales, donde son recurrentes las quejas por el pésimo servicio que presta la obra social (ver aparte), y donde los nuevos contratados nada saben sobre cómo atender a los jubilados, sino que más que nada centran sus acciones en la campaña política y poco concurren a los despachos donde deberían trabajar.

Desvirtuación K


Desde su creación en mayo de 1971, el PAMI ha sido usado como una caja negra para financiar la política, pero sin dudas que el kirchnerismo ha sobrepasado todos los límites, al utilizarlo como un garante de su desacertada política económica, vaciando al instituto y cometiendo un verdadero desfalco del erario público y una estafa para los verdaderos dueños de la obra social: los jubilados y pensionados.

 En la capital bonaerense el organismo público ha sido totalmente deformado de los principios para los que fue creado, y hoy puede observarse como la política le ha ganado al profesionalismo, sumergiendo al mismo en la inacción, viendo cómo los fondos públicos son utilizados para la campaña del oficialismo y no para mejorar la mala prestación que se le brinda al afiliado.

En diálogo con Hoy la ex interventora de la obra social, Graciela Ocaña, que durante su mandato saneó sus cuentas, señaló que “las irregularidades del PAMI llegan a La Plata con la contratación de cientos de ñoquis pertenecientes a agrupaciones oficialistas, que no tienen ninguna clase de pergaminos para ocupar los cargos que ocupan”.


La legisladora porteña por Confianza Pública, denunciante de la causa por la contratación de ñoquis en el PAMI, destacó que “esto se ve en un total desfasaje en las prestaciones que se brindan que son muy deficitarias, que es una queja continua de los beneficiarios de La Plata”.

“El PAMI en vez de dedicarse a brindar servicios se ha dedicado a pagar sueldos fabulosos a militantes de La Cámpora para que vayan a aplaudir a la presidenta en el patio de las Palmeras y no gastar la plata en los jubilados, y con esto se juega y se pone en riesgo la salud de los más viejos”, resaltó Ocaña.

La corrupción que rodea a la administración kirchnerista llega a todos los rincones del Estado. El PAMI es un claro ejemplo de esto, y su situación en La Plata una muestra cabal de su descomposición. Lo dramático, es que en el medio de todo esto están los jubilados, que acuden indefensos a este accionar pagando con sus propias vidas la desidia oficial.


Malas prestaciones

El régimen de prioridades es una de las peores herencias que dejará el oficialismo al próximo gobierno. En el PAMI platense puede verse como la mayor parte del dinero que recibe anualmente, está más dedicado a pagar los altos sueldos de la militancia rentada oficial, que a brindar un servicio serio y de calidad a los jubilados.

Esto ha llevado a que en los últimos meses hayan aumentado los reclamos en lo que tiene que ver con algunos insumos básicos para la Tercera Edad, como el oxígeno, algunos medicamentos para la vista y para enfermedades oncológicas, algunas prótesis especiales y demoras en la calidad del servicio.

Hoy, la obra social en la ciudad cuenta con apenas 4 trabajadores sociales para cubrir las necesidades de decenas de miles de afiliados, y se ven graves demoras en el otorgamiento de las internaciones geriátricas, no realizándose además ninguna clase de seguimiento en internaciones en hospitales y cualquier otro establecimiento de segundo nivel.

Órgano militante


Hasta abril de este año, la regional PAMI de La Plata, estuvo a cargo de una ex integrante de Quebracho, Araceli Mastellone, quien junto a la cuestionada titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, crearon la agrupación “Las Cristinas”, que pedía por una “Cristina eterna”.

A lo largo de los años, Hoy informó cómo Mastellone habría favorecido a las dos clínicas que administra Juan Manuel de Rosa, médico privado Bonafini, un dirigente de Quebracho denunciado por el sindicato ATSA por mantener una deuda millonaria con los empleados al no depositar los aportes previsionales y por querer “vaciar” el sanatorio que administra en Berisso, intentándolo convertir en una cooperativa.

Gracias a los servicios prestados a la causa oficial, Mastellone fue premiada con el cargo de Coordinadora General Operativa de la Gerencia de Promoción social y Comunitaria del instituto, desde donde sigue siendo una fiel discípula y defensora del modelo K.



Mastellone fue pareja además de Raúl “Boli” Lescano, líder de la organización para muchos ligada a los servicios de inteligencia, y que fuera condenado junto a Fernando Esteche por haber protagonizado desmanes contra un local partidario de Jorge Sobisch en el año 2007.

PRONTUARIOS K (11)


El fin de ciklo es un éxodo jujeño





Domingo 27 de septiembre de 2015


 Por Roberto Cachanosky

 Pensando solo en su futuro, CF deja tierra arrasada para complicarle la vida al próximo presidente.



Hacia fines de julio de 1812, Manuel Belgrano, entonces al mando del Ejército del Norte, que estaba asentado en Jujuy, recibe de Buenos Aires la orden de retirarse hacia Tucumán, dado que no podían mandarle refuerzos para enfrentar a las fuerzas realistas que bajaban del Alto Perú.

El 29 de Julio de 1812, Belgrano dicta un bando militar ordenando la retirada al pueblo jujeño en cual se especificaba la orden de que la retirada de toda  la población debía dejar tierra arrasada frente al enemigo. El ejército español no debía encontrar alimentos, ni casas, ganado ni mercancías de cualquier característica. Los cultivos tenían que ser cosechados o quemados, las casas destruidas y las mercaderías enviadas a Tucumán. En definitiva, la idea era que los realistas no tenían que poder encontrar nada que pudieran utilizar cuando avanzaran en Jujuy y persiguieran a las fuerzas de Belgrano.

Esta introducción viene a cuento porque el fin de ciclo kirchnerista se parece bastante el éxodo jujeño dado que por impericia o en forma deliberada, el kirchnerismo está tratando de dejar tierra arrasada para que el próximo presidente encuentre tal destrucción económica y social que le resulte difícil la gobernabilidad del país.

Cuando digo fin de ciclo kircherista me refiero a que CF no pudo ser reelecta luego de perder las elecciones en 2013 y no consiguió que ningún candidato del riñón puro del kirchnerismo pudiera presentarse a elecciones con alguna chance de éxito. Tuvo que recurrir a Scioli, a quien el matrimonio basureó a lo largo de 12 años, para intentar tener una salida lo menos complicada posible, pero no le interesa dejar tierra arrasa en caso que Scioli gane las elecciones porque Scioli no es kirchnerista puro. 

Cualquiera que no sea un kirchnerista puro es el enemigo para CF y sus incondicionales.

CF está a dos meses y medio de tener que dejar el sillón de Rivadavia y luego de 8 años de ser presidente más los cuatro de Néstor Kirchner deja un país empobrecido a pesar de haber tenido un contexto internacional único en décadas por el aumento de los precios de exportación de los productos argentinos.

Cristina Fernández le deja al próximo gobierno 30% de pobres, es decir 12 millones de personas pobres, 2 millones de indigentes, una altísima tasa de desocupación y serios problemas de desnutrición en el NOA y NEA especialmente.

Para enfrentar esa crítica situación social deja un Banco Central sin reservas libres para ser utilizadas. En otras palabras, el Banco Central tendrá más deudas en dólares que reservas. Deja también un gasto público récord, tanto en monto como en baja calidad, con una presión impositiva récord. Pero a pesar de tener una presión impositiva récord, también deja uno de los déficits fiscales más grandes de los últimos 40 años.

En su éxodo jujeño, CF deja el cepo pero, además, un tipo de cambio oficial que es artificialmente bajo porque se sentaron sobre él para usarlo como ancla contra la inflación, otro de los problemas que deja el kirchnerismo en su éxodo jujeño.

Deja a las economías regionales destruidas, un sector agropecuario en el cual ya ni la soja es negocio en varias zonas del país, la industria paralizada, una legión de “empleados” públicos que cobran sueldos por no hacer nada y un largo listado de problemas más.

El error que puede llegar a cometer la oposición es el mismo que cometió De la Rúa en 1999 dejándose condicionar por el alfonsinismo al nombrar a Machinea junto con Miguel Bein en el ministerio de Economía.

Recordemos que Machinea, junto con Miguel Bein, establecieron la tablita del impuesto a las ganancias a fines de 1999 para que los contribuyentes pagaran más impuestos a las ganancias. El equipo económico de Machinea no quiso bajar el gasto público y prefirió exprimir más al contribuyente, con lo cual profundizaron la recesión heredada que, por cierto, ya hacia fines de 1999 estaba cediendo. Recordemos que, además del problema fiscal, de endeudamiento y de tipo de cambio, en enero de 1999 Brasil, nuestro principal socio en el MERCOSUR, devaluó el real lo cual impactó sobre la actividad económica local. La decisión de poner a un heterodoxo en el ministerio de economía fue lo que sepultó las chances de De la Rúa de utilizar los primeros 100 días de gobierno para poner un mínimo de orden en la economía.

Veo que Scioli no tiene idea para dónde ir con la economía. Es más, tiene como principal asesor económico a uno de los inventores del impuestazo de De la Rúa. Massa dispone de un equipo económico cuyos integrantes ya tuvieron su oportunidad y fracasaron, en tanto que Macri, para no perder votos, parece optar por lo “políticamente correcto” pero económicamente inviable aceptando que este último párrafo da para el debate. Mi impresión es que, por falta de capacidad de comunicación, se está perdiendo una gran oportunidad para mostrar, al mismo tiempo de ganar votos el desastre que hizo el kirchnerismo.

 Mostrar la tierra arrasada que está dejando CF, el destrozo de valores al que llevó el kirchnerismo tratando de meterle en la cabeza a la gente que tiene derecho a no producir y a vivir del trabajar ajeno son algunos de los puntos que podrían machacarse en estos tiempos. Si políticamente no puedo decir todo lo que voy a hacer, al menos tengo que poder mostrar toda la destrucción que deja el kircherismo.

De todas maneras el punto que me interesa resaltar es que deliberadamente el kirchnerismo le está dejando tierra arrasada al próximo gobierno. En consecuencia, la oposición tiene que tener en claro que, dado que ya no hay margen para financiar la fiesta de consumo, tendrá que poner en funcionamiento la economía vía la inversión y las exportaciones. Y en forma muy urgente.


Se puede aplicar un plan económico que evite que el destrozo que hizo el kirchnerismo le genere el mínimo perjuicio a la población, pero que quede claro. No es tiempo para tibios. Se sabe que el kirchnerismo está dejando tierra arrasada en su retirada, tener presente este dato es clave para, oportunamente, comunicarle a la población en forma clara y precisa los destrozos generados deliberadamente por el kirchnerismo y como se piensa superarlos para empezar a recuperar estos 12 años dilapidados por el matrimonio.

Scioli insiste con no debatir: "La gente ya sabe lo que pienso"




28/09/2015 | 22:41

“No voy a prometer cosas que después no quiera cumplir”, se excusó el candidato a Presidente por el FPV. 


El candidato presidencial por el Frente Para la Victoria (FPV), Daniel Scioli, reiteró el lunes por la noche en Rosario que no debatirá con sus competidores y argumentó que no va a "prometer cosas que después no pueda cumplir".

"Yo debato todos los días y la gente sabe muy bien lo que pienso", justificó el gobernador de bonaerense antes de participar en una cena con empresarios y dirigentes en esta ciudad.

Según aseguró, "lo digo con toda humildad, soy el candidato más previsible, el más confiable y el más coherente", en comparación con sus rivales de la oposición, aunque evitó pronunciarse sobre la posibilidad de ganar en primera vuelta o que haya un ballottage con alguna de las otras listas. 

Durante la conferencia de prensa, Scioli reivindicó su experiencia tras dos mandatos como gobernador bonaerense y se diferenció indirectamente del líder del PRO, Mauricio Macri, al afirmar que la provincia tiene una superficie 1.500 veces mayor que la de la Capital Federal. "Es como invitar a comer a una persona o a mil quinientas", dijo el ex vicepresidente, citando declaraciones anteriores de su esposa Karina Rabolini.

Scioli estuvo acompañado por el diputado nacional y presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Julián Domínguez y, al ser consultado sobre la posibilidad que integre su eventual gabinete, sostuvo: "No se puede prescindir de una hombre con la experiencia de Julián". 

N de R La Misère Porc:



Reabren la investigación por la designación de los hijos de D´Elía en la ANSES





28/09/15

JUSTICIA


La Sala I de la Cámara Federal revocó el archivo de la causa que había firmado la jueza Servini de Cubría. Dos de los hijos del dirigente K adeudaban materias del secundario

 N de R La Misère Porc:
Pedimos mil disculpas  a nuestros lectores, por publicar la foto de semejante basura.
La Sala I de la Cámara Federal revocó el archivo de una causa donde se investigaba la designación de los hijos de Luis D'Elía en el ANSES.

El archivo de la investigación lo había firmado la jueza federal María Romilda Servini de Cubría. En abril pasado, el fiscal ante la Cámara Federal, Germán Moldes, había pedido que continuara la investigación para determinar si los hijos del dirigente kirchnerista habían sido designados como funcionarios de la Administración Nacional de la Seguridad Social de acuerdo a las normas de ingreso a empleados de esa repartición estatal.

Según la denuncia, Pablo Emanuel, Facundo Nahuel y Luis Ignacio D´Elía no "contaban con el colegio secundario terminado", requisito necesario según el Convenio Colectivo de Trabajo que rige en ANSES.

Según cuenta el portal Infobae, después de una respuesta del área jurídica de ANSES, Servini de Cubría decidió archivar el caso por "inexistencia de delito". Pero el fiscal Carlos Rívolo apeló y argumentó que las designaciones se hicieron sin observar los requerimientos legales.

En el artículo 29 apartado 1.4 del Convenio Colectivo 305/98 se establece que quienes ingresen en el "agrupamiento Administrativo y de Servicios Generales" -donde se encuadrarían los hijos de D´Elía- deben "contar con al menos Título Secundario (ciclo completo) conforme la Ley Nacional de Educación Nº 26.026, o la que lo reemplace en el futuro".

Ante la apelación de Moldes, la Sala I de la Cámara Federal decidió revocar el archivo firmado por Servini de Cubría con la firma de los camaristas Eduardo Farah, Eduardo Freiler y Jorge Luis Ballestero. Además, se determinó que se reabriera la investigación y se ordenaron algunas medidas de prueba.

A partir de la decisión de los camaristas, Servini de Cubría debe realizar lo que está pendiente de investigar y luego resolver si hay que procesar o sobreseer a los imputados.

El costo de aislarnos del mundo




MARTES 29 DE SEPTIEMBRE DE 2015 • 00:29



LA NACION

Uno de los grandes dramas de la economía argentina ha sido cerrarse al comercio mundial. Aislarnos por miedo a competir. Aislamiento que trajo un creciente deterioro de la productividad y aumento de la pobreza.

Pero resulta que ahora no sólo se habla de sustituir importaciones, el nefasto mecanismo por el cual se somete al consumidor a la oferta de unos pocos productores locales que venden productos de baja calidad y a altos precios, sino que quieren inventar la pólvora lanzando la idea de sustituir exportaciones, entendiendo por tal cosa que en vez de exportar mercaderías hay que ponerle barreras a las exportaciones de esos productos para que se consuman internamente.
En rigor, este "invento" ya lo llevó a cabo el kirchnerismo limitando las exportaciones de carne para que se consumiera internamente. El resultado fue que se liquidaron 12 millones de cabezas de ganado vacuno y hoy comer carne es un verdadero lujo. La sustitución de exportaciones hizo que, finalmente, la carne fuera más cara y se perdieran miles de puestos de trabajo por la cantidad de frigoríficos que tuvieron que cerrar.
Lo mismo ocurrió con las restricciones a las exportaciones de lácteos, que derivó en el cierre de miles de tambos y familias enteras sin trabajo. O con el trigo, que al limitarse su exportación lo que se ha conseguido es que este año se siembre la misma cantidad de hectáreas que se había sembrado 100 años atrás.
Ver el mundo como una amenaza implica perder miles de puestos de trabajo, baja inversión y productividad, con lo cual los salarios reales no suben.
 Tomando datos de la Organización Mundial del Comercio, a principios del siglo XX las exportaciones argentinas representaban entre el 2 y el 3 por ciento del total de las exportaciones mundiales. Esta participación se mantiene hasta casi fines de la década del 40, es decir, el primer gobierno de Perón y un poco más allá del fin de la Segunda Guerra Mundial. A partir de entonces, comienza una continua declinación de nuestra participación en las exportaciones del mundo llegando en la actualidad representar solo el 0,4% del total de las exportaciones mundiales. En toda la década del 90 y de la era kirchnerista las exportaciones argentinas representan el 0,4% de las exportaciones del mundo.
Si la Argentina se hubiese integrado al mundo como lo hicieron, por ejemplo, Canadá y Australia, y mantuviésemos un 2,5% del total de las exportaciones del mundo, las exportaciones argentinas deberían ser del orden de los U$S 475.000 millones anuales en vez de los U$S 60.000 millones que se exportarán este año.
Ver el mundo como una amenaza implica perder miles de puestos de trabajo, baja inversión y productividad, con lo cual los salarios reales no suben.
Quienes defienden la sustitución de importaciones y de exportaciones debería formularse la siguiente pregunta: ¿Cuántos puestos de trabajo y riqueza dejaron de generarse por aislarnos del mundo? ¿Cuánta pobreza creamos al aislarnos del mundo?
Los datos muestran que cuando nos integramos al mundo, fines del siglo XIX y principios del XX, el PBI por habitante crecía al 3,6% anual y que, cuando nos aislamos del mundo, empezamos a crecer a una tasa anual del 1 por ciento.
La brecha del ingreso per cápita entre la Argentina y otros países se fue agrandando en detrimento nuestro. De acuerdo a los datos de Angus Maddison, en la década del 40, cuando definitivamente nos aislamos del mundo, la Argentina tenía un ingreso per cápita que era un 113% más elevado que el de España. En 2010, último dato disponible de la serie de Angus Maddison, España tenía un ingreso per cápita que era un 64% más alto que el nuestro.
Si hacemos la comparación con Irlanda, nosotros teníamos un ingreso per cápita que era un 48% más alto. En 2010, los irlandeses tenían un ingreso per cápita que era 115% más alto que el nuestro.
Al cerrar la economía, la competitividad disminuye porque al vender sólo al mercado interno los costos fijos aumentan por unidad producida ya que se produce sólo para 40 millones de personas.
En la década del 40% el ingreso per cápita de Australia era un 52% más alto que el nuestro. En 2010 la diferencia llegaba al 150%. Con relación a Chile, en la década del 40 nuestro ingreso per cápita era 36% más alto que el de nuestro vecino y en 2010 el ingreso per cápita de Chile superaba al de la Argentina en un 35%.
Al cerrar la economía, la competitividad disminuye porque al vender sólo al mercado interno los costos fijos aumentan por unidad producida ya que se produce sólo para 40 millones de personas, algo totalmente diferente a producir para miles de millones de consumidores que podríamos captar en el mundo. Al mismo tiempo, el volumen de inversiones que se necesita para producir sólo para el mercado interno es mucho menor al que se necesita si se produce para el mundo. La inversión es menor, los puestos de trabajo se generan en menor cantidad y la productividad es tan baja que deriva en salarios reales cada vez menores.
El primer suicidio económico de la Argentina fue aislarse del comercio internacional mediante la sustitución de importaciones. Como si esto no hubiese alcanzado, ahora quieren sustituir exportaciones, algo que de hecho ya ocurrió al perder competitividad y tener una decreciente participación en el comercio mundial.
De ser un desierto, la Argentina se transformó, a partir de 1880 con la consolidación nacional, en una potencia económica. Una ola de inmigrantes, que no venían a buscar un plan social sino a trabajar, llegó a la Argentina. El valor del esfuerzo y el trabajo imperaban en estas tierras. Las inversiones fluían y las exportaciones no paraban de crecer. Ese resultado no fue casualidad, hubo un marco institucional llamado Constitución Nacional de 1853/60 que fue la base sólida sobre la cual se construyó un país que era admirado en el mundo.
Es seguro que ese enorme potencial que tenemos para crecer puede repetirse. Por supuesto que no bajo la locura de la sustitución de exportaciones e importaciones ni del populismo depredador. Puede lograrse recuperando los valores que imperaron en la Constitución que nos legó Juan Bautista Alberdi, ese genio tan ignorando en estos tiempos y que nos indicó que la integración al mundo era el camino.
Por ignorar a nuestros sabios próceres como Alberdi tiene un costo. Y así nos va.

Ante la inminente disyuntiva.





Por Alberto Medina Méndez




Queda muy poco tiempo para que la incertidumbre quede atrás. Cuando lo electoral sea superado, se empezará a escribir el capítulo que todos esperan con ansias. El destino de la sociedad depende, en buena medida, de las determinaciones que se tomen en lo político y económico.

Las instituciones se han debilitado y la economía es una bomba de tiempo aunque, en realidad, lo más grave ha sido la creciente crisis moral y la destrucción de los valores. En eso la reconstrucción parece más compleja.

Hablar de lo económico produce escozor a muchos, especialmente a los políticos que intuyen que el dilema está muy próximo, que deberán tomar decisiones de gran impacto y asumir además sus inevitables consecuencias.

Pero también son demasiados los ciudadanos que prefieren evadir el asunto, minimizar la cuestión e ilusionarse con que solo habrá que enfrentar una leve turbulencia insignificante y casi imperceptible. A veces parece mejor ignorar lo que sucede y evitar preocupaciones, utilizando esa dinámica como un mecanismo de defensa. No es una actitud muy racional, ni atinada, pero es demasiado frecuente y eso explica la actualidad.

En poco tiempo habrá que decidir entre el gradualismo y las políticas de shock. El rumbo ya no es parte de la discusión. Solo resta definir los tiempos, las formas y los instrumentos tácticos de una estrategia general compartida aunque siempre repleta de sutiles matices opinables.

El sendero ya está trazado y no precisamente porque se haya debatido lo suficiente, ni por los consensos logrados de la mano del diálogo civilizado. El inocultable desmadre y la inmensa nómina de disparates que forman parte del arsenal de decisiones del pasado, no solo en lo político, sino también en lo económico, conformaron este escenario peligroso obligando a encaminarse en una dirección indiscutible, ya no por las convicciones profundas, ni por las coincidencias, sino por imperio de las circunstancias.

Propios y extraños lo saben. Unos, intentan disimular con discursos ambiguos sus verdaderas impresiones sobre lo ocurrido en el pasado y el contexto que tendrán que administrar si triunfan. Los otros, aprovechan con oportunismo lo que sale a la luz, pero son conscientes que decir la verdad sobre lo que se debe hacer pone en riesgo sus posibilidades electorales.

El presente parece invitar a mentir sistemáticamente y ocultarles a todos la más cruda realidad. Coinciden en sugerir que la salida de este tembladeral será sencilla, casi sin secuelas relevantes y prefieren transmitir optimismo.

Lo cierto es que la fiesta se acabó y no precisamente por una actitud reflexiva, sino porque simplemente se agotó el presupuesto. El despilfarro de estos años ha encontrado un límite, ese que imponen los hechos sin pedir permiso. Las determinaciones desquiciadas han montado este presente del que no será nada fácil salir.

Todo se pudo prever, pero para los que gobernaron era más cómodo seguir con la inercia y hacerse los distraídos. Han conseguido aguantar hasta la finalización de su tiempo en el poder y ahora preparan el relato para asegurarse que el futuro sea absoluta responsabilidad ajena.

Los que aspiran a tomar la posta saben de esta comprometida situación, pero, por ahora, solo les preocupa acceder al poder. Luego diseñarán el discurso para justificar los cambios que precisan hacer y se ocuparán de aclarar que sus decisiones eran totalmente necesarias.

Lo que viene se parece mucho a una tempestad aunque no se pueda dimensionar el tamaño del impacto final. La sociedad debería comprenderlo. No se puede vivir del aire, no es razonable obtener recursos sin esfuerzo y mucho menos subsidiar indefinidamente a una porción significativa de la comunidad, prolongando en el tiempo este disparate.

Esa fantasía tiene un límite. Es posible forzar las cosas durante algún tiempo. Abundan los mecanismos artificiales que permiten hacerlo y extender la vigencia de esa ficción, siempre un poco más. Pero en algún momento todo se desmorona y entonces se debe hacer lo preciso.

Pronto, muy pronto, habrá que tomar decisiones. Lo único que resta explicar es el modo de hacerlo. No se trata de una discusión entre los que prefieren continuidad y los que quieren cambiar. Seguir igual que ahora ya no es una opción. Solo queda saber si la agonía se extenderá por largo tiempo antes de tocar fondo para luego recién volver a arrancar, o si se seleccionará un camino más tortuoso en el corto plazo, con la intención de abordar entonces una recuperación más acelerada.

No existe una fórmula mágica que resuelva este intríngulis. No se sale de semejante lista de errores groseros sin pagar costos importantes. Nada es gratis y es bueno aprender a hacerse cargo de los desaciertos electorales de los ciudadanos. La apatía, la abulia, la indiferencia y el desinterés también tienen un precio y es saludable asumirlo para evitar renovados tropiezos.

El panorama no es auspicioso. Lo que viene no será simple. Los gobernantes tendrán que seleccionar las variantes tácticas, las herramientas y medidas que tomarán para salir de este caos. Queda poco tiempo para que el telón se levante y empiece un nuevo ciclo. El final de esta historia sigue siendo un gran misterio. Lo cierto es que se agotó el plazo y que se avecinan tiempos de definiciones. Ya no se puede ocultar que la sociedad está ante la inminente disyuntiva.


El presente artículo del Sr. Alberto Medina Méndez es publicado en La Misère Porc, por gentileza de su autor.

Alberto Medina Méndez

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DESDE EL PAPADO “SE PUEDE HACER... MUCHO MAL”









28 de Septiembre del año 2015 - 1356


Con enorme tristeza me pongo a escribir este artículo sobre el viaje del Papa a Cuba y a los EEUU porque la conclusión a la que me veo obligado a llegar es que no fue el viaje de un Papa sino el de un líder mundial interconfesional, exaltado por todos, especialmente por los no creyentes y por los promotores del mundo agnóstico e igualitario en que vivimos.

Sobre su actuación en Cuba ya he escrito en lo dos artículos anteriores a este. En resumen: esa fue una visita de confraternización con los tiranos comunistas de la Isla y de desprecio por las víctimas de la tiranía castrista.

Sobre la visita a los EEUU, es decir, sobre sus dos discursos más importantes, el que dijo ante el Congreso norteamericano y el que dijo ante la ONU más algunas frases sintomáticas dichas aquí allá, sólo puede concluirse que no fueron palabras del Vicario de Cristo en la tierra sino las de un político de aceptación mundial, a cuyas palabras podían adherir todos los malos sin distinción, pero no los católicos, puesto que en ningún momento mencionó el nombre del Divino Salvador, ni menos aún, la Redención realizada en la Cruz, ni tampoco aquellas categóricas palabras de Nuestro Señor: "El que creyere y se bautizaré, se salvará, el que no creyere será condenado" (S.Marcos,16,16).  De los discursos del Papa surgía un programa mundano aceptable para el laicismo más exigente, como si no hubiera un Creador que le hubiera puesto al mundo leyes inviolables ni un Salvador que hubiera exigido creer en Él para salvarse.

Cuando mencionó a Dios, lo nombró como el "Dios de Moisés", olvidándose de que Jesucristo es Dios y, como hombre, es posterior a Moisés, y hasta en forma indirecta responsabilizó a Dios por "los conflictos violentos, de odio nocivo, de sangrienta atrocidad, (porque son cometidos)... incluso en nombre de Dios y de la religión. Somos conscientes de que ninguna religión es inmune a diversas formas de aberración individual o de extremismo ideológico." ("Clarin", 25/9/2015, pag. 4).

La Santa Iglesia Católica , Apostólica, Romana fue puesta así por el Papa en el mismo plano de capacidad de perversión que el fanatismo asesino del Islam, fingiendo ignorar que ese es el principal caso de "odio nocivo" existente en el mundo actual (con su contrapartida de las represalias terroristas del Estado de Israel).

Atacó también a la Iglesia nuevamente por los casos de "pedofilia" de que la acusa la prensa masónica, dando por sentado de que esos pocos casos en un mar de vocaciones heroicas religiosas y sacerdotales, son suficientes para convertirse en una culpa colectiva de la Iglesia. Las palabras y gestos del Papa en ese sentido siguen siendo como una especie de "confesión de parte" que releva a los enemigos del catolicismo de toda la carga de la prueba y al mismo tiempo, silencia los mismos pecados cometidos a mansalva por otros grupos que no son católicos y, lo que es más grave, olvida que la casi totalidad de esos actos repugnantes son obra de homosexuales, a los cuales el Papa salva de toda acusación con su famoso "¡¿Quién soy yo para juzgarlos?!".

Sería interminable enumerar las tristísimas muestras de poco amor a la verdad católica que el Papa dio en este viaje. Entre ellas, el no haber enfatizado y apenas mencionado en forma sesgada, el crimen del aborto que en EEUU ha sido legalizado y se cometen millones cada año.

Sólo me queda resumir el resultado de su viaje en una frase que les dijo a unos argentinos que viajaron en su auto desde la argentina hasta Filadelfia y a los que recibió en privado fuera de programa comentando entre risas su "locura" (pero no recibió en Cuba a las familias de los presos políticos) y pidiendo que rezaran por él: "Lo necesito, esto es muy difícil, desde este lugar se puede hacer mucho bien y MUCHO MAL, recen por mi" ("La Nación", 28/9/2015, pag. 3).

Esa es probablemente una de las pocas verdades que dijo: desde su cargo papal puede hacer mucho mal, y es difícil negar que lo está haciendo a mansalva.

Cosme Beccar Varela   


El presente artículo del Dr. Cosme Beccar Varela es publicado en La Misère Porc, por gentileza de su autor.

Sólo faltan cuatro semanas: República Argentina o narco-argenzuela:





Septiembre 28 de 2015


Por Humberto Bonanata 

“Cristina Fernández de Kirchner es el ejemplo flagrante de la vocación autodestructiva de la Argentina” - Mario Vargas Llosa


“Si quiere ser presidente, primero tiene que perderle el miedo a C.F.K. y luego proyectar sus ideas” decía Mauricio Macri a su reducido entorno del Cardenal Newman. Nicolás Caputo, Pablo Clusellas y José Torello escucharon más de una vez en boca de su amigo desde el  jardín de infantes, hace más de medio siglo.

Scioli fracasaba una vez más con su “fe, optimismo y esperanza” en el operativo “Aire y Sol” bautizado así por Jorge Asís.

Sin esperarlo, como salvavidas de plomo, sumó dos “aportes intelectuales” para su campaña: Axel Kicillof y Estela Barnes de Carlotto.

El primero, junto con Alejandro Vanoli, al autorizar la Resolución de la Comisión Nacional de Valores que pretende confiscar los ahorros de los bonistas de títulos argentinos al pesificarlos al valor del dólar oficial -menor a diez pesos- frente al “contado con liquidación” que supera los catorce pesos.

Nos hizo acordar a Jorge Milton Capitanich, cuando jefe de Gabinete de Duhalde prometía devolver dólares a quien depositó dólares en 2002 y luego creó junto a Remes Lenicov y Lavagna el “Coeficiente de Estabilización de Referencia” (C.E.R.), un índice tan confiable como las estimaciones del I.N.D.E.K. actual.

Por otra parte Carlotto lo ungió al ex motonauta como “puente de plata” para el retorno de Cristina de Kirchner en 2019. “Es diferente aunque es confiable” deslizó ante un reportaje radial de Luís Novaresio por AM 910 (La Red).

“Scioli no sabe qué puede decir y sabe lo que no puede decir” destacaba el periodista Alberto “Beto” Valdez en el programa “Somos Nosotros” que co-conduce junto a Willy Kohan de lunes a viernes de 19.00 a 20.00 hrs. por FM Milenium (106.7).

“Semana trágica” para Scioli de la que sólo recogió un mensaje: esquivarle el bulto al debate presidencial que se negó a firmar a principios de año frente a las cámaras de “A Dos Voces” ya que “su palabra valía más que una firma”.

Para culminar la tragicomedia semanal, Jorge Lanata desguazó el “narcotráfico legalizado” con precursores químicos similares a la efedrina del que sus entrevistados destacaron su crecimiento geométrico desde 2003, año de comienzos del kirchnerato.

Un aire de esperanza nos regalan nuevamente los mendocinos: “aspirante a intendente de Godoy Cruz (La Matanza mendocina) propiciado por el gobernador electo, Alfredo Cornejo -Tadeo García Zalazar- superó el 58 % de las PASO municipales de esa comuna.”

“De esta forma consiguió dos veces y media más votos que el candidato consagrado en el FpV -Lucas Ilardo (21%)-; siete más que el representante del FIT -Martín Baigorria (8%)- y doce más que su rival interno -Leonardo Salvini (4,7%)- quien ayer -no obstante- reafirmó la necesidad de “alternancia” en el radicalismo departamental y destacó que en su agrupación “no hay funcionarios de la comuna”.

“La proyección radical de los resultados de las PASO sobre la general de noviembre próximo atribuyó ayer a Cambia Mendoza la posibilidad de colocar 5 de las 6 bancas que se renuevan en el Concejo Deliberante y 1 para el FpV. Pero la lectura peronista de esta proyección estimó en 4 para Cambia Mendoza (que renueva 5 bancas) y 2 para el FpV (que renueva sólo una)”. (Fuente: Los Andes).

Dentro de cuatro semanas nadie puede garantizar cómo será la paz social en la Argentina, ni tampoco que el “aluvión zoológico siglo XXI” salga a las calles en la madrugada del 26 de octubre a proclamar la “victoria por la fuerza”. Esta vez mucho más rentado y organizado que el que protagonizaron los humildes y creyentes trabajadores del 17 de octubre de 1945.

No se irán fácilmente, saben que les espera la justicia y la cárcel.